Despedida Emotiva a la Tía Gladys Porras Reveco

Este martes 1 de abril de 2025, el Salón Municipal de San Javier fue el escenario de una emotiva ceremonia en la que se rindió homenaje a los asistentes de la educación y profesores que, tras años de servicio, se acogieron a su merecida jubilación. Un evento cargado de sentimientos y nostalgia, especialmente para la comunidad educativa del Liceo Bicentenario Manuel Montt, que tuvo la oportunidad de despedir a una de sus figuras más queridas y emblemáticas: la tía Gladys Porras Reveco.
Gladys Porras, quien después de 45 años de labor y 34 años dedicados al área de Informaciones en el establecimiento, cerró un ciclo lleno de entrega, cariño y dedicación. Durante su extensa trayectoria, fue una figura fundamental para generaciones de estudiantes y docentes, quien siempre destacó por su voluntad de servicio, compromiso y su cálido trato hacia todos quienes la rodeaban. La tía Gladys fue mucho más que una funcionaria ejemplar; fue una presencia constante que, con su sonrisa y disposición, se convirtió en un pilar insustituible para el liceo.
La ceremonia estuvo llena de recuerdos y nostalgia, reviviendo momentos especiales de su larga trayectoria. Durante años, la tía Gladys fue el rostro amable que saludaba a todos los estudiantes y personal al inicio de cada jornada. Su saludo matutino, cálido y cercano, será profundamente extrañado por todos los que tuvieron el privilegio de cruzarse con ella cada día en los pasillos del liceo.
Es difícil poner en palabras lo que representa alguien que, durante más de cuatro décadas, se ha entregado al servicio de la educación. Para generaciones presentes y pasadas, la tía Gladys será recordada no solo por su eficiencia y capacidad, sino por su afecto y generosidad. Su partida marca el fin de una era para el Liceo Bicentenario Manuel Montt, pero su legado perdurará en cada rincón del establecimiento, en cada recuerdo compartido y en la huella que deja en todos quienes tuvieron el privilegio de conocerla.
Tía Gladys, le deseamos el mayor de los éxitos en esta nueva etapa de su vida. Que disfrute de ese merecido descanso, con la satisfacción de saber que ha dejado una huella imborrable en la educación de San Javier. ¡Gracias por tanto!